Harold Trompetero: Su búsqueda constante de reinvención

Estuvo unos pocos días en Medellín, el director bogotano Harold Trompetero, quien viene promocionando su última película, Nadie sabe para quién trabaja que veremos, como es tradicional, a partir del 25 de diciembre en las principales salas de cine de la ciudad. Con su frescura de siempre, habló del estancamiento del cine de humor colombiano y su reinvención como director. Entrevista para el periódico El Mundo.

Harold Trompetero

Dialogamos con este publicista de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, quien inició su carrera en 1993 con un cortometraje de 7 minutos llamado Lasaña y que realizado importantes películas colombianas, como Diástole y sístole (2000), Muertos del susto (2007), Riverside y El man (2008), El paseoMi gente linda y bella (2012), El paseo I” (2013), Los Oriyinales (2016) entre otras.

Entrevista

¿Desde qué arrancaste como director de cine, cómo has visto la evolución del cine colombiano?

El cine colombiano ha evolucionado mucho a nivel artístico sobretodo por la ley de cine, pero siento que se ha estancado en el tema de humor y en el popular, mientras que en el cine artístico hemos evolucionado lo que nos ha permitido llegar hasta ser nominados a los Oscar con Ciro Guerra y El abrazo de la serpiente.

Veo que en el cine de humor hay un retroceso…en el año 2007, yo hice una película que se llama Muertos del susto que estaba protagonizada por Alerta y Don Jediondo. Era la retoma de un humor antiguo con los humoristas del programa de Sábados felices, que hoy volvemos a ver en la cartelera. Los protagonistas del stand comedy, de los programas de humor, están volviendo al cine, por su popularidad y recordación, lo que permite que haya buenos ingresos en la taquilla, pero siento…que esto está viniendo en picada. Las películas que se han lanzado este año de ese corte, han hecho la mitad o menos de lo que hicieron el año pasado en taquilla, y siento que el público se está volviendo más exigente y está pidiendo otro tipo de cine en ese sentido.

El cine de autor…

En el cine más de autor, las películas como Amazonas o La señorita María, que van a nuestra realidad de una manera más crítica están cogiendo mucho auge, por eso yo también me he aventurado en ese género, con la película Riverside, y si el público responde es porque hay una buena conexión entre ellos.

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‘Nadie sabe para quien trabaja’

¿Este año estrenas una comedia Nadie sabe para quién trabaja, cómo la podes definir de acuerdo a tu respuesta anterior?

Es una comedia popular pero editorial. Es una comedia que trata de rescatar ese humor que estaba perdido en el género del humor. Ese humor de Gente de la universalLa estrategia del caracol, que es muy masivo y popular, que llega a nuestro ADN, logra generar una crítica social en el espectador, tratando de mover esas fibras para cambiar esos comportamientos que no son tan bacanos como quisiéramos.

El trabajo actoral

¿Cómo fue tu trabajo de dirección con un actor tan experimentado como Robinson Díaz y una actriz que apenas está comenzando como Jessica Cediel para validar lo que me acabaste de explicar?

Cuando propusimos hacer Nadie sabe para quién trabaja, nuestro actor era Robinson Díaz. Yo creo que uno de los grandes problemas que tenemos en Colombia es que no existe un star system, es decir, un mecanismo de estrellas para que la gente vaya cine aparte de los dos o tres cómicos y stand comedy que existe…. Entonces la gente de pronto va a ver a esos cómicos y no ha esas grandes estrellas que antes había. Y Robinson Díaz es el llamado a hacer ese star system que necesitamos. Por otra parte, Robinson tiene un nivel de crítica muy alto, no es un actor cualquiera, y casi lo que él protagoniza es un sello de garantía, no sólo porque es una persona muy formada, sino por su nivel actoral. Cuando nos sentamos a trabajar en la película, él manifestaba lo importante del argumento y decía que íbamos a hacer destornillar de la risa a un país y ha generar un golpe en el hígado a todas las personas que la vieran.

Jessica Cediel

Igualmente, necesitábamos compensar el reparto con una cara linda, si bien Jessica no es una persona muy reconocida en el campo actoral, pero tiene una gran conexión con lo popular y cotidiano del país. Pero si me preguntas, Jessica tiene todo el potencial para ser una Sofía Vergara, porque tiene unos dotes actorales impresionantes. Recuerdo que ya habíamos hecho una película con ella Todos para uno y le noté eso, y acaba de hacer la voz para Condorito, igual hace poco terminó de actuar en un filme en Perú, y posiblemente estará en poco tiempo en Hollywood.

Por eso te digo que es una compensación de tener lo popular con la presencia de un actor tan crítico y preparado como Robinson.

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El potencial de los actores

¿Cómo es el trabajo de un director para sacar ese potencial de esos actores que están dentro de la película?

El trabajo con Robinson Díaz es realmente una cosa brutal, pocas veces yo me he enfrentado a un actor tan formado, tan crítico, tan analítico como él. Las jornadas eran muy extenuantes en el buen sentido de la palabra, era escribir, reescribir, cuestionar, crear el chiste y buscar lo que se necesitaba. Fue un trabajo muy satisfactorio, no sólo por eso, sino que fue muy interesante sacar todo el potencial de personas como Robinson Díaz, Jessica Cediel o Hernán Méndez, que es un personaje muy conocido en Colombia por películas dramáticas, como Los colores de la montaña, y fue muy interesante verlo construir su personaje en otro género diferente, lo que le permitió ser muy chistoso y divertido, lo que le va a lograr un reconocimiento popular a nivel nacional por su alto grado actoral.

Es un trabajo de mucho diálogo con los actores, de mucho ensayo, de mucho humor, de mucha reflexión sobre el país.

Éxito de taquilla

Antes de comenzar la entrevista me decías que está película va a ser un éxito rotundo en el país. ¿Por qué?

Yo no sé si será un gran éxito, pero si estoy seguro que la gente se va destornillar de la risa. Creo que va a ser una película memorable, que va a ser referente en la comedia nacional. No sé si será el mega éxito de taquilla, pero sí sé que la gente que va a ir se va a divertir muchísimo. ¿Por qué estoy tan seguro? Porque es mi trabajo… yo he tratado de reinventarme en todas las películas que he hecho, incluso en las de humor, y creo que este es el primer paso a consolidar una carrera de humor, tratando de hacer un cine crítico pero cómico y estar muy conectado con lo popular. Creo que esos factores serán fundamentales para que la gente salga muy satisfecha de la película.

Retrospectiva

Mirando tu filmografía, realizaste las dos primeras películas de El paseo que fueron referentes en el género del humor, ¿con Nadie sabe para quién trabaja estás esperando lo mismo?

Total. Yo creo que el cine genera imaginario, lo que hace en últimas, más allá de entretener, es generar formas de pensar, de concebirnos y de mirar el mundo. Esto viene de teorías muy antiguas, desde Platón, pasando por toda la historia del teatro hasta llegar al cine, que refleja esas formas. Creo que Colombia está en un proceso donde la comedia ha quedado estancada y yo, he tratado de ser uno de los vanguardistas en la búsqueda de la comedia. Obviamente hay otras personas que han logrado cosas superiores a las que yo he hecho, como Sergio Cabrera o Felipe Aljure; pero sí creo que es el momento de rescatar otro tipo de humor, el humor negro, el humor incisivo, el humor crítico, especialmente este último por lo que estamos viviendo en el país una coyuntura muy crítica con esa polarización que tenemos. Esta película es un granito de arena a evolucionar lo que tenemos con nuestros lenguajes audiovisuales cómicos.

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Proyectos

¿Tienes algún proyecto cinematográfico para el 2018 ó 2019?

Sí, estamos trabajando en varias películas, de hecho, tenemos algunos proyectos. Uno de ellos es una película que se llama Victoria, es más bien un drama. Además estamos trabajando para el próximo año en una comedia llamada La fiesta y personifica que todo en Colombia termina en una fiesta, o en una rumba, desde un velorio hasta un nacimiento, mejor dicho, es una mamadera de gallo.